Manuel de Soto y Solares

Manuel de Soto y Solares (Sevilla, 1 de febrero de 1839 – 1906) fue un destacado constructor de guitarras español, perteneciente a una larga tradición de guitarreros sevillanos. Su vida y obra se desarrollaron en la ciudad de Sevilla durante la segunda mitad del siglo XIX, donde su taller se situaba en la emblemática Calle Cerragería. Fue contemporáneo de otros maestros de la guitarra como el célebre Antonio de Torres Jurado, con quien compartió espacio de trabajo y una profunda conexión en el oficio.

Nacido en una familia de guitarreros, Manuel de Soto y Solares aprendió el arte de la construcción de guitarras de su padre, Manuel de Soto Castañón, también guitarrero. Esta tradición familiar se remontaba incluso a sus abuelos, quienes también fueron fabricantes de guitarras, según consta en su certificado de bautismo. Soto y Solares, por tanto, representaba la tercera generación de una familia dedicada a este oficio, una herencia que se reflejaba en la calidad y el esmero que aplicaba a cada uno de sus instrumentos.

Manuel de Soto estableció su taller en la Calle Cerragería de Sevilla, una zona donde confluían otros artesanos del gremio. A lo largo de su carrera, trabajó en distintos locales de esa calle, primero en el número 36, luego en el número 4 y finalmente en el número 7. Entre los guitarreros con los que convivió y colaboró, destacó Antonio de Torres, quien es considerado el creador de la guitarra moderna tal como la conocemos hoy.

Se ha especulado que Antonio de Torres pudo vender guitarras que no cumplían sus expectativas a Soto y Solares para que este las comercializara bajo su nombre

Manuel de Soto y Solares se casó con Rosa Sánchez, con quien tuvo cinco hijos: tres hijas y dos hijos. Tras su fallecimiento en 1906, sus hijas continuaron el negocio familiar bajo la marca Sucesores de Manuel de Soto y Solares, transformando el taller en una fábrica que siguió produciendo guitarras hasta bien entrado el siglo XX.

Hoy en día, se conservan apenas una quincena de guitarras construidas por Manuel de Soto y Solares, muchas de las cuales se encuentran en museos y colecciones privadas. Entre ellas, destaca el Museo de Artes y Costumbres Populares de Sevilla, donde se conserva parte de este legado histórico.

A pesar de la limitada cantidad de instrumentos que se han preservado, la labor de Manuel de Soto y Solares sigue siendo recordada como una pieza clave en la evolución de la guitarra española. Su técnica y estilo reflejan una tradición artesanal de gran calidad y belleza, que ha influido en generaciones posteriores de constructores de guitarras tanto en España como a nivel internacional.